Mientras entierran al rehén israelí asesinado, el líder de Hamás amenaza con matar a otros si se acercan las FDI

JERUSALÉN, Israel – Un día difícil en Israel, ya que uno de los rehenes más conocidos de Hamas en Gaza, Hersh Goldberg-Polin, fue enterrado pocos días después de su brutal asesinato y el de otros cinco rehenes a manos de Hamás, en lo profundo de un túnel debajo de Rafah.

Miles de israelíes acudieron al funeral de Hersh en Jerusalén sin poder creer que realmente se había ido. Su madre, Rachel, habló con su hijo asesinado.

"Sé que estás aquí. Sólo tengo que aprender a sentirte de otra manera", dijo. "Y Hersh, hay una última cosa que necesito que hagas por nosotros. Ahora, necesito que nos ayudes a mantenernos fuertes y a sobrevivir".

El presidente israelí, Isaac Herzog, se dirigió al funeral del ciudadano estadounidense-israelí que se había convertido en un símbolo de la batalla para liberar a los rehenes.

"Lamento mucho no haber protegido a Hersh en ese día tan oscuro", se disculpó Herzog. "Lamento mucho no haberlo podido traer a casa".

El presidente agregó: "Él ha cambiado nuestro mundo y ha tejido su esencia de luz y amor en la historia del pueblo judío y en nuestra historia humana, para siempre".

Rachel Goldberg-Polin dijo que ella y su familia estaban convencidos de que su hijo regresaría a casa con vida.

"Durante 23 años, tuve el privilegio de tener el increíble honor de ser la mamá de Hersh", compartió. "Lo acepto y le doy las gracias. Ojalá hubiera sido por más tiempo".

Jon, el padre de Hersh, también compartió su dolor, pero también su esperanza: "Durante 330 días, mamá y yo buscamos la piedra proverbial que podíamos mover para salvarte. Tal vez, sólo tal vez, tu muerte sea la piedra, el combustible que traerá a casa a los 101 rehenes restantes".

Hersh y otros cinco israelíes fueron asesinados cuando los soldados israelíes se acercaban para liberarlos. 

Hamas comenzó a difundir los últimos mensajes de los seis israelíes que acaban de ser asesinados. El grupo terrorista afirma haber dado nuevas órdenes a quienes custodian a los cautivos. Los portavoces no especificaron las órdenes, pero un gráfico indicaba que "la presión militar (conduciría a) la muerte y el fracaso".

El presidente Joe Biden culpó el lunes al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, por no hacer lo suficiente para lograr un acuerdo de alto el fuego que pudiera liberar a los rehenes.

Cuando un periodista le preguntó a Biden si creía que el primer ministro estaba haciendo lo suficiente, Biden respondió: "No".

En una conferencia de prensa el lunes por la noche, Netanyahu se dirigió a la nación y dijo que Hamás estaba bloqueando el acuerdo y que él está más comprometido que nadie con la liberación de los rehenes.

"Nadie debería predicarme sobre esto", afirmó Netanyahu con énfasis.

Hamás ahora afirma que rechaza un acuerdo porque Netanyahu se niega a renunciar a su exigencia de que las tropas israelíes permanezcan en el Corredor de Filadelfia que une Gaza con Egipto.

"Éste es el oxígeno y el armamento de Hamás", explicó el primer ministro.

Insiste en que, sin tropas de las Fuerzas de Defensa de Israel para proteger el corredor, Hamás lo utilizará para introducir armas para rearmarse y amenazar permanentemente a Israel.

"Este corredor es diferente de otros corredores, de otros lugares. Es central, determina todo nuestro futuro", afirmó Netanyahu.

La muerte de los rehenes provocó protestas masivas en todo el país por el cautiverio de los rehenes restantes y la brutal muerte de los asesinados.

Sin embargo, las huelgas convocadas por los líderes sindicales y un grupo de familias de rehenes fracasaron en gran medida el lunes después de que un tribunal las declarara ilegales.

Aun así, muchos manifestantes salieron a las calles para protestar por la negativa del gobierno a alcanzar un alto el fuego que libere a los rehenes, sin importar el costo.

Avi Lavi, manifestante de Jerusalén, dijo: "Ha llegado el momento de levantarse y despertar, de hacer todo lo posible para que los rehenes regresen con vida".

Otros protestaron contra los manifestantes, insistiendo en que ayudan a Hamás y dañan a Israel.

Yitzhak Ben Yishai, residente de Jerusalén, argumentó: "Lo que están haciendo ahora es destruir la unidad del pueblo de Israel".

Fuente: cbn