Iglesia libanesa lanza 50 horas de ayuno y oración mientras la guerra se avecina y la gente huye

A medida que aumentan los combates con Hezbolá a lo largo de la frontera norte, aumenta el miedo en el lado libanés. Muchos residentes se están trasladando al norte o abandonan el país por completo. Un pastor de Beirut le dijo a CBN News que, pase lo que pase, está decidido a quedarse para ayudar a su congregación y a su país sin importar el costo.  

"Todo el mundo espera que suceda lo peor, todo el mundo tiene miedo", según el pastor Said Deeb, que dirige la Iglesia de Dios en el Life Center de Beirut. Dice que el Líbano está en pánico. 

"Las embajadas están pidiendo a su gente que abandone el Líbano inmediatamente, todas las embajadas. Entonces, la gente se está yendo, está huyendo. Hay una especie de pánico en el aeropuerto y la gente está, ya sabes, asustada porque no saben cuándo La guerra comenzará", afirmó.

Desde que Hamás desató su masacre del 7 de octubre contra civiles israelíes, ha habido un aumento de la actividad militar entre Israel y Hezbolá a lo largo de la frontera. Deeb, que sobrevivió a la explosión del puerto de Beirut en 2020 y ha vivido numerosas guerras, dice que no tiene miedo.

"Tengo paz y tengo paz en mi corazón esta vez de que no habrá guerras en el nombre de Jesús. ¿Por qué? ¿Por qué tengo esta seguridad? Porque estamos orando y lanzamos 50 horas de ayuno y oración las 24 horas del día. Y creer en Dios para la paz", dijo.   

Desde que comenzaron estos últimos combates en Israel, Deeb dice que cada vez más personas se presentan a la iglesia, incluso no creyentes.

"Las personas en el vecindario tienen los ojos abiertos y vienen a mí, 'Por favor, ¿podemos inscribirnos en el Instituto Bíblico?' Y ahora tenemos 360 estudiantes todos los días", nos dijo Deeb.

La iglesia, ubicada en una de las zonas más pobres de Beirut, también proporciona comidas y otros artículos esenciales a la gente, incluidos muchos refugiados de Armenia, Irak y Palestina. "Hacemos comida para todos los que vienen a la iglesia. Y a los estudiantes de la Biblia les ofrecemos comida", nos dijo.

Hezbolá es la fuerza política y militar más poderosa del Líbano y, para los cristianos libaneses, puede ser un tema complicado. Puede haber tanto apoyo como culpa para Israel, por lo que incluso discutir sobre política puede ser peligroso. Es por eso que el pastor Deeb sigue enfocado en la misión de predicar a Jesús y orar por la paz.

"La iglesia nos necesitará. La gente nos necesitará. Porque si en caso de que estalle la guerra, aquí es donde está la mayor necesidad. No puedo salir del país, dejando a mi gente muriendo y dejando a todos hambrientos y sufriendo y sin refugio. Esto me romperá el corazón", dijo Deeb.

Dice que si empiezan a caer bombas, tiene un lugar donde esconderse. 

"Sí, tengo un lugar. El Señor es mi refugio y refugio. Este es el único lugar que tengo. Créanme, ha funcionado con nosotros. El Señor me dijo en 2006, una cosa que dijeron: 'El lugar más seguro del planeta'. La Tierra debe estar en la voluntad de Dios. Mi voluntad es el lugar más seguro donde estarán'", dijo Deeb.

Fuente: cbn