Internacional - Líder ortodoxo advierte que Europa se volverá musulmana en 30 años, Rusia en 50

CBN LATINO - Un sacerdote ortodoxo ruso dice que Occidente se prepara para la mejor conquista del islam.

"Queda muy poco tiempo para la muerte de toda la civilización cristiana", afirma Dmitri Smirnov, presidente de la Comisión Patriarcal sobre Asuntos Familiares y Protección de la Maternidad y la Infancia. "Varias décadas, tal vez 30 años, bueno, tal vez en Rusia durará 50, no más", dijo el sacerdote al canal de televisión Soyuz de Rusia.

Smirnov dice que el Islam finalmente barrerá el continente europeo porque los musulmanes están dispuestos a sacrificarse con el fin de avanzar en sus propios valores.

"El musulmán moderno está dispuesto a morir por su fe", dijo Smirnov. "Se envuelve con dinamita y se hace estallar dondequiera que su mulá lo ordene, está dispuesto a sacrificarse, es etiquetado de terrorista, pero su objetivo no es aterrorizar al mundo".

El controversial arcipreste ortodoxo ruso afirma que los jóvenes musulmanes ven su sacrificio como una causa noble para proteger sus sociedades.

“Y, ¿por qué mueren estos jóvenes?”, pregunta Smirnov. "Porque no quieren vivir en un estado gobernado por homosexuales, no quieren esta música pop obscena, no quieren que sus valores se corrompan, los valores familiares en primer lugar".

Smirnov afirma que la dominación del islam obligará a los cristianos a permanecer en el terreno y que "serán como guisantes dispersos por toda Europa".

"Los cristianos no se atreven a asomarse, se congregarán en pequeños grupos y serán perseguidos", afirma Smirnov. "El ensayo ya está en marcha: en Europa, las mujeres cristianas están siendo violadas y asesinadas, y los hombres que se ven obligados a proteger a sus mujeres no pueden hacerlo (mientras que los violadores son sentenciados a un máximo de un año de libertad condicional). Esa es la Europa de hoy, y somos los siguientes en la línea".

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Él termina su presentación diciendo que mientras los musulmanes están listos para suicidarse, los cristianos en Occidente son simplemente "enfermos exhaustos, tan buenos como muertos".