Latinoamerica - Colombia: La Iglesia y ministerios continúan llevando apoyo físico y espiritual a Mocoa

CBN LATINO - Tras la avalancha ocurrida en Mocoa, Colombia, la Iglesia trabaja fuertemente para dar apoyo físico y espiritual a los afectados. Mientras tanto, el gobierno promete hacer todo lo posible para sacar a la comunidad adelante.

Las torrenciales lluvias que afectan al cono sur, han dejado un trágico saldo en Mocoa, Colombia. Cientos de personas perdieron la vida cuando tres ríos aledaños a esa población se desbordaron.

Con el pasar de los días, se han entregado los cuerpos de los fallecidos para darles sepultura.

Muchos otros, tratan de recuperar algunas pertenencias, como Arguenis Beltran.

“Este es el lugar donde vivía mi hermana y ella perdió todas sus cosas personales, su ropa, sus electrodomésticos, entonces estamos sacando de en medio de los escombros, del lodo, del barro, ropa, lo que podamos sacar, para ver que se puede recuperar”, dice Arguenis Beltran, residente de Mocoa.

En unas horas cayó el 30 por ciento de las precipitaciones de un mes. Lo que desencadenó en una avalancha de agua, barro, piedras y árboles que devastó a Mocoa.

Las autoridades han prometido dar toda la ayuda necesaria para enfrentar la emergencia.

“Quiero reiterar que nuestros corazones están con estas familias. Acabo de hablar con muchas de ellas. Vamos a hacer todo lo posible, no solo para ayudar a las familias que perdieron a sus seres queridos, sino a todas las que perdieron sus casas y los que han sufrido en esta terrible tragedia”, dijo Juan Manuel Santos, presidente de Colombia.

Ante el desconsuelo de muchas personas por la pérdida de sus parientes y amigos, pastores de Mocoa se movilizan para dar aliento espiritual a los sobrevivientes. Además, la Iglesia trabaja para suministrar ayuda material.

Nuestra corresponsal en Bogotá, Angélica Pacheco, sigue de cerca los esfuerzos de la Iglesia.

“Bueno, algunos sectores que rodean a Mocoa han podido llegar más rápidamente llevando lo primordial y lo que tenían a la mano, para poder mitigar un poquito el dolor y las necesidades de esta población. En cuanto a Bogotá, se está movilizando toda la iglesia en general, como la Iglesia Cruzada Cristiana, Asambleas de Dios, entre otras, que han colocado algunos puntos específicos para poder recolectar estas ayudas físicas”, precisa Pacheco.

Los templos evangélicos también están operando como albergues.

“Y precisamente las iglesias, sus estructuras se han aprovisionado para poder ser de alguna manera, ese albergue momentáneo para estas familias y personas que lo perdieron todo o en gran parte”, indica Pacheco.

Pacheco motiva a los creyentes para que oren pidiendo a Dios que dé consuelo a los abatidos.

“Así que, la invitación sigue siendo a seguir orando por esta nación, por esta población, nuestra población aquí de Mocoa, que ha sido afectada por este evento natural, y que bueno, creemos que Dios es el único que puede seguir dándoles ese abrigo, ese consuelo y la paz que tanto necesitan”, añade Pacheco.

El ministerio World Vision o Visión Mundial también se encuentra en la zona afectada valorando los daños.

“Con el ánimo de mantener la prestación del servicio educativo y la protección de niños, niñas y adolescentes, se está valorando con socios y autoridades educativas locales la necesidad de instalación de aulas temporales o redistribución de población afectada hacia sedes escolares sin afectación, también se requiere la entrega de kits pedagógicos, didácticos, recreo deportivos y kits escolares, así como adelantar procesos de atención psicosocial a niños, niñas, adolescentes, maestros, maestras y padres de familia”, dice un comunicado de la organización.

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World Vision ha focalizado “sus acciones en el establecimiento de al menos 3 espacios amigables y protectores para la niñez, con una cobertura de al menos 1.000 niños en etapa escolar, en los cuales se brindará apoyo psicosocial, actividades psicopedagógicas, orientación a padres y dotación para volver a las jornadas escolares. Las acciones a desarrollar son complementarias y articuladas con la respuesta de gobierno y de otras organizaciones humanitarias”.