Pekín acorrala a Taiwán con nuevos ejercicios militares: La independencia significa la guerra
Las operaciones del Ejército Popular de Liberación (EPL) tenían como objetivo ensayar una reducción del espacio de respuesta del ejército de Taiwán
El régimen comunista chino lanzó nuevas maniobras militares alrededor de la isla de Taiwán con unidades del Ejército, la Armada, las Fuerzas Aéreas y la fuerza de cohetes para «acercarse a la isla desde múltiples direcciones» y «lanzar una seria advertencia a las fuerzas separatistas que buscan su independencia».
Las patrullas y ejercicios incluyeron simulacros de ataques aéreos y terrestres, así como el control de pasos clave para probar la preparación para el combate conjunto de sus tropas, según un comunicado emitido por el comando de operaciones del Ejército Popular de Liberación.
Los ejercicios tienen lugar después de que el presidente taiwanés, William Lai, tachado de «independentista» y «alborotador» por Pekín, definiese a China como una «fuerza externa hostil» y anunciase iniciativas para frenar las operaciones de «infiltración» de Pekín contra la isla.
Según el coronel Shi Yi, portavoz del Comando, los ejercicios del EPL pretendían lanzar una «seria advertencia» y tenían el objetivo de «disuadir a las fuerzas separatistas que buscan la independencia de Taiwán».
«Estos ejercicios se centran principalmente en patrullas de preparación para el combate marítimo-aéreo, ataques a objetivos marítimos y terrestres, y bloqueos en zonas clave y rutas marítimas para poner a prueba la capacidad de operaciones conjuntas de nuestras tropas», señala un comunicado del Comando del Teatro Oriental de Operaciones publicado en su cuenta oficial de la red social WeChat.
China habría desplegado 71 aviones y 21 buques de guerra durante estas maniobras militares a gran escala
Por su parte, la portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado (Ejecutivo chino) Zhu Fenglian aseguró que los ejercicios son «un firme castigo» contra las «flagrantes provocaciones» de Lai y una «seria advertencia» a las «fuerzas separatistas que intentan socavar la paz».
«La 'independencia' de Taiwán significa la guerra y buscarla implica empujar al pueblo taiwanés a una situación peligrosa», agregó Zhu, según recoge la agencia estatal Xinhua.
Duro discurso de Lai contra China
El presidente de Taiwán pronunció la semana pasada uno de sus discursos más duros contra China, anunciando diecisiete medidas -entre ellas, la reinstauración de los tribunales militares o la revisión estricta de las visitas de ciudadanos chinos a Taiwán- para contrarrestar la campaña de «infiltración» del Partido Comunista chino (PCCh) en territorio taiwanés.
Además, catalogó por primera vez a China como una «fuerza externa hostil», lo que fue interpretado por algunos analistas como un cambio en las políticas defendidas por su antecesora y como un intento de modificar el estatus jurídico de Taiwán.
En respuesta, la prensa estatal china arremetió contra el presidente taiwanés, acusándolo de «destruir la paz», de «provocar» a China y de «silenciar a aquellos que abogan por el desarrollo pacífico de las relaciones a través del estrecho de Taiwán».
«Sus acciones están llevando a Taiwán hacia un peligroso precipicio. Lai está arriesgando imprudentemente la seguridad y el bienestar de los 23 millones de taiwaneses», denunció el medio estatal chino Xinhua en un editorial.
Taiwán se gobierna de forma autónoma desde 1949 bajo el nombre de la República de China y cuenta con unas Fuerzas Armadas y un sistema político, económico y social diferente al de la República Popular China, destacando como una de las democracias más avanzadas de Asia.
Sin embargo, el régimen comunista de Pekín siempre ha visto a Taiwán como una «parte inalienable» del territorio chino y no ha descartado el uso de la fuerza para concretar la «reunificación» de la isla y el continente, uno de los objetivos trazados por el presidente chino, Xi Jinping, tras su llegada al poder en 2012.
Fuente: eldebate